TOROS.- Una vez mas; con las manos en la cabeza

Pensaba que era algo que a mi nunca me iba a suceder, que esto pasaba solo en ciertos sectores extremistas en los cuales creía no coincidir. Pero me equivoqué, resulta que hay personas que a priori parecen tolerantes, respetables, respetadas y respetadoras; que dan la sensación de pensar cosas con cierta lógica o al menos con ciertos argumentos fundamentados a la hora de vomitar (y permitid que utilice esta expresión) opiniones.Resulta que el otro día dejé mi coche en un parking cercano al trabajo en el que tengo costumbre dejarlo; resulta que me atiende un hombre con el que he hablado en ya muchas ocasiones a lo largo de los tres años que lleva ese hombre trabajando en el susodicho parking; y resulta que cuando me dispongo a pagar sale el tan manido tema de la crisis y de ahi dos segundos de conversación que desencadenó en el mas bochornosos intercambio (bueno, poco intercambio porque yo hasta sin palabras me quedé) de ideas en el que me he visto involucrada en mucho tiempo (creo que podría decir en mi vida).

Os reproduzco el trozo de la conversación que dió pie a lo posterior:
H: ¿Cómo está la cosa con la crisis? ¿Dará este verano el sueldo del trabajo para disfrutar de la feria?
Yo: No se si para la feria, ahora que seguro que con mis entradas para los toros no me voy a quedar.

AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHH!!!!!
MALDITAS PALABRAS PRONUNCIADAS EN EL MOMENTO MAS IMPERTINENTE

Este letrado de la ciencia en general, con el poder absoluto sobre las verdades de la tierra, me empezo a soltar una tras otras que en este blog no tendrían cabida pero en resumen os diré que me afirmó con total rotundidad y sin lugar a replica ninguna que todos o la gran mayoría de las personas que somos aficionados a los toros pagamos por ver este espectaculo porque estamos sedientos de sangre, porque si no fueramos a los toros tendriamos que saciar esa necesidad de agresividad y sangre a pie de calle, en nuestro día a día. ¿Qué os parece? Que ya nos veo degollando a la gente por la calle o mordiendo cual vampiros para quedar saciados.
Pero ahi no acabó todo porque el hombre ya que se puso, se puso. Intenté terciar palabra y lo unico que me permitió decirle es que me opinión y las cosas que me estaban diciendo además de increibles me parecian intolerantes y además infudamentadas. Y el hombre, sin titubear, me dijo que no, que todo eso lo eramos nosotros.

Pero como os contaba, ahí no acabo su conversación (porque yo poco mas hablé) me dijo que los que asistían al fultbol eran porque de esa manera podía expresar su agresividad de manera comunitaria, que de no asistir también andarían pegando a la gente por la calle y que aprovecharían la mas mínima oportunidad para agredirse. ¿y ya está? NOOOOOOOOOOOOOOO Para colmo, añadió, que los españoles somos (y cito textualmente) subnormales, porque no se nos ocurre otra cosa que ir disfrazados detrás de un trozo de madera al que le decimos que es la virgen.

¡¡Madre de dios!!

Aquí volví a intervenir, a decir que hablaba de manera infudamentada en esto ultimo también y me dijo que no le replicase que con los años que él tenía y los libros que había leido y lo que le había escuchado a psicólogos sabía perfectamente lo que decía.

Ahí queó! Que no es poco y es duro de asimilar.
Doy inaugurado el turno de palabra para que foguéis todo lo que en su momento fogué yo, porque desde luego, no es para menos.

Un saludo